Nuestra historia

No se sabe a ciencia cierta la fecha exacta de la fundación de la primera banda de música de Güímar, aunque varias fuentes la sitúan a partir de la década de 1850.

Una de las más antiguas referencia la encontramos en "Historia de la música en Tenerife y con especialidad en La Laguna", del año 1859; donde se cuenta que se organizó una banda de aficionados en la ciudad lagunera que provocó una emulación por toda la isla que llegó hasta el pueblo de Güímar.

Con respecto a los impulsores de esta primera banda, sólo sabemos que el ilustre Beneficiado de Güímar, el Doctor don Agustín Díaz Núñez, figuró entre sus principales fundadores, pues siempre fue un gran entusiasta de la música; en los últimos años de vida le dispensó un decidido apoyo y, como recompensa, ésta lo acompañó en su sepelio interpretando marchas fúnebres.

D. Agustín Díaz Núñez
D. Agustín Díaz Núñez

Lo cierto fue que la afición musical de Güímar siguió en auge, y su banda arraigaría cada vez más entre la población al amenizar las Fiestas Patronales de San Pedro y El Socorro, con mayor dedicación aún que la desplegada en Granadilla; esto motivó la participación de dicha agrupación en otros pueblos del sur tinerfeño.

Tal fue el incremento de la afición musical de la localidad en los siguientes años, que muy pronto se vio desbordada la banda pionera y se creó una segunda agrupación musical; así, Güímar ocupó desde entonces un lugar privilegiado dentro de la música de viento en Tenerife.

Durante algunos años se mantuvieron en Güímar las dos bandas de música, de las que desconocemos sus nombres y los respectivos directores, hasta que los componentes de ambas llegaron al convencimiento de que lo mejor para el pueblo y para la afición musical que en él subsistía, era la fusión en una sola agrupación. 

En las últimas décadas del siglo XIX, entre 1894 y 1910, la banda sufriría altibajos, pero se mantendría en funcionamiento, en gran parte, gracias  a un gran amante de la música: el Coronel retirado don Constantino Hernández Rodríguez, pues con anterioridad había creado y fomentado varias bandas militares y en esos años se volcó con la de Güímar, adquiriendo de su propio peculio instrumentos, atriles y partituras para ella.

SOCIEDAD FILARMÓNICA "EUTERPE"

A comienzos de 1904, merced a las gestiones de don Miguel Rodríguez Cervantes, se hizo cargo de la dirección de la banda don Miguel Castillo Alfonso, destacado músico aragonés, a la sazón profesor de clarinete de la Banda Municipal de Música de Santa Cruz de Tenerife. 

La de Güímar estaba regida en ese entonces por una Sociedad Filarmónica, denominada "Euterpe", cuyo presidente en 1905 era don Santiago García Olivera, aunque ya contaba con cierto apoyo municipal. 

En este año continuaba como profesor de música don Ángel Hernández González, quien había sido director de la banda y tenía una academia particular, en la que sostenía todavía unos pocos alumnos, pues la mayor parte de los aficionados ya estudiaban en la academia de la propia agrupación, regida por el maestro Castillo, que en marzo de 1924 tenía 24 alumnos "que prometían mucho".

La primera promoción de esta nueva banda que salió a la luz, estaba compuesta por 14 músicos: Ignacio Malledo y su sobrino Rafael, Andrés Reyes, Miguel Rodríguez, Domingo Hernández, Hipólito García, Federico León, Rafael Estévez, Andrés Hernández, Alfonso Hernández, Eulogio Hernández, Isidro García, Lucio Pérez y Domingo Campos. Poco tiempo después, según podemos contemplar en una fotografía que ilustra este trabajo, la plantilla había ascendido a 18 músicos, habiéndose incorporado, entre otros, don Álvaro Díaz Martín; al principio el uniforme se reducía a la gorra, pues parece que no había dinero para otra cosa. Sin embargo en 1910 ya estaba perfectamente uniformada

A comienzos de 1906 la banda ya había alcanzado un digno nivel musical, por lo que el 25 de marzo de ese año se ofreció a acudir a los festejos que iban a celebrase en Santa Cruz de Tenerife con motivo de la visita de S.M. el Rey Alfonso XIII. 

A comienzos de 1914, el Ayuntamiento de Güímar pretendió la municipalización de la banda de música "Euterpe", para lo cual encargó al Secretario de la Corporación, don Aníbal Hernández Mora, que redactara un "Proyecto de Reglamento General de la Banda Municipal de Música, que fue presentado por éste en la sesión plenaria celebrada el 18 de abril de ese mismo año, y cuyo fin principal ere "coordinar las aspiraciones del Ayuntamiento con los no menos respetables intereses y derechos de la sociedad Euterpe".

En este anteproyecto de reglamento, se proponía que la plantilla de la banda fuese: un director, diez músicos primeros, y diez músicos segundos, además, existiría el número de aspirantes y educandos que estimase oportuno el director; por otra parte, la banda obtendría la cantidad de 1000 ptas. para atender a los gastos de alquileres, conserje, alumbrado, obras musicales y renovación de instrumentos. 

El director sería nombrado por el Ayuntamiento, y tendría la obligación de dirigir la banda en conciertos públicos y actos oficiales, así como en los ensayos, que serían como mínimo tres a la semana. El reglamento propuesto tenía 26 artículos, más tres transitorios. La mayor parte de los cuales se referían a las obligaciones del director y los músicos, correctivos, tocatas, sustituciones, etc. En dicha sesión se acordó que una comisión contactara con la sociedad "Euterpe", para estudiar la viabilidad del proyecto.

El 25 de abril, se volvió a llevar al pleno municipal el asunto de la municipalización de la banda de música, pero como hubieron algunos puntos donde no se pusieron de acuerdo los comisionados, volvió a quedar sobre la mesa. Al mes siguiente, en nueva sesión del ayuntamiento de 23 de mayo, vista la imposibilidad de acuerdo con la mencionada sociedad Filarmónica, se estudió la posibilidad de organización de una banda municipal, designándose una comisión compuesta de los Sres. Martín Tejera y Almeida Medina, para que viesen el medio de levar a la práctica tan importante extremo. Los cierto fue que la propuesta de municipalización condujo a la desaparición de la sociedad "Euterpe".

A causa de las tensiones surgidas entre los miembros de la antigua sociedad musical, don Miguel Castillo decidió renunciar a la dirección de la nueva banda municipal y abandonar la localidad, a mediados de ese mismo año 1914, de este modo, vamos a entrar en un período de crisis en la agrupación musical, que se prolongará durante varios años. Para intentar reorganizarla, el 14 de junio dispuso el Ayuntamiento que se anunciase por un período de 60 días, la vacante de plaza de director; pero mientras no se cubriese, se encargaría de la dirección el que, hasta ese momento, había sido músico y subdirector de la misma, don Alfonso Hernández y Hernández. A éste lo sucedió, como director interino, don Luis Sánchez. 

Hacia 1917 ya estaba al frente de la banda don José María Peón Requejo, pianista andaluz, padre del que luego será destacado compositor, don José Peón Real.

Este director le supo dar bastante realce a la agrupación, que llegó a contar con una plantilla de 28 músicos, a pesar de los difíciles momentos que le tocó afrontar; ya que, ante la quiebra económica que sufría, el Ayuntamiento acordó por unanimidad: "Reducir la subvención que por todos conceptos, incluso gastos del Director, percibe la Banda municipal de música, a cincuenta pesetas mensuales". 

Para intentar subsanar el anterior acuerdo, D. José María Peón Requejo, como Director de la banda de música, solicita se subvencione al organismo que dirige con trescientas pesetas, por las tocatas que durante los meses de verano celebre en la plaza pública, pero, como es de suponer, fue negativo. A pesar de todo, la banda siguió actuando, para regocijo de los vecinos, permaneciendo el Sr. Peón Requejo en ella, hasta el mes de noviembre del año siguiente.

El 3 de diciembre de 1919, se designa con el carácter de director interino a don Hugo Pagani, quién viene desempeñando este cargo de principios del mes corriente. Sin embargo, fue muy corta la actuación del nuevo director con la banda güimarera, pues en la sesión del Ayuntamiento del 24 de marzo de 1920 el Sr. Alcalde hizo presente que desde primeros del acutal, por incompatibilidades de carácter existentes entre el Director interino de esta Banda municipal, Sr. Pagani, y el personal de la misma, éste se había negado, casi en su totalidad, a asistir a los ensayos y prestarle su colaboración, siendo ineficaces, cuantos intentos había efectuado cerca de aquellos, para que depusieran su actitud, la cual manifestaron ser irrevocable, por creerse ofendidos injustamente por el Sr. Pagani.

Que en virtud de aquella disposición de ánimo, habíale hablado al dicho Director, reconociendo ambos, ante la insistente intransigencia de los músicos, la imposibilidad de organizar la agrupación musical.

Por lo que, no existiendo en la localidad otros profesionales que los disidentes y hallándose la Banda virtualmente desecha, proponía y así se acordó , cese en su cargo de Director interino el Sr. Pagani. 

LA GLORIOSA ETAPA DE DON MIGUEL CASTILLO

El 4 de abril de 1920, el entonces alcalde, don Ignacio González García, "propuso y el Ayuntamiento así lo acuerda, que hallándose vacante la plaza de Director da la Banda Municipal de Música, debía proveerse la misma, por concurso entre los profesionales, para lo cual creía conveniente anunciarlo en la prensa de la capital, por el término de ocho días, especificando en el anuncio, la asignación que para dicho cargo figura en el presupuesto, y el plazo para la admisión de las solicitudes".

Al día siguiente, el mencionado alcalde encomendó a su antiguo amigo, don Miguel Castillo Alfonso, que por el momento era director de la banda de música de Icod, la reorganización de la disuelta banda municipal, a fin de cuando se proveyese la plaza de director, cuyo concurso se hallaba en tramitación, tuviese preparado al personal necesario para empezar a funcionar inmediatamente. Prueba evidente de la eficaz labor del maestro Castillo fue el éxito alcanzado en la tocata verificada el día 3 de mayo siguiente. En pleno celebrado el día 9 de ese mismo mes "se dio lectura al expediente incoado para la provisión de la plaza de Director de la Banda Municipal, según el cuál, resulta no haberse presentado sino una sola solicitud suscrita por don Miguel Castillo Alfonso. En su virtud, la Corporación acuerda por unanimidad, nombrar Director de la dicha Banda al Sr. Castillo".

Directores 


D. Gundemaro Baudet

D. Ángel Hernández González

D. Miguel Castillo Alfonso

(Director de 1904 a 1914 y de 1920 a 1929)

Miguel Castillo nació en Zaragoza en 1876, aunque desde muy corta edad se trasladó a Madrid, donde adquirió los primeros conocimientos musicales con su padre, quien era director de la banda de música de El Pardo. Casi de niño ingresó en el Conservatorio Superior de la mencionada capital, donde cursó solfeo, composición, armonía y clarinete, completando así su formación musical. Su tío don Emilio Oliete, solicitó a su padre que lo enviase a su ciudad natal para que se fuera haciendo cargo del negocio familiar; al poco tiempo lo encontraron en el sótano de la tienda llorando y abrazando su clarinete; este hecho propició que su padre lo reclamase a El Pardo, siendo tal la alegría del joven Miguel, que escribió una de sus primeras composiciones, «La Pilarica», mazurca dedicada a su «querido padre a la vuelta de Zaragoza».

Fue destinado a realizar el servicio militar en el Batallón de Cazadores de Canarias, de Santa Cruz de La Palma hacia 1898, donde dirigió además la banda municipal. En esta etapa palmera compuso pasodobles como «El subalterno», «El Ayudante» y «Cazadores de Canarias», entre otras producciones.

Hacia 1902, gracias a la celebración del primer concurso de bandas de Santa Cruz de Tenerife, el Maestro Castillo se incorporó a la banda municipal de la capital tinerfeña, lo que propició que a comienzos de 1904, gracias a las gestiones de un amigo, don Miguel Castillo se hiciera cargo de la dirección de la banda de música de Güímar, que por entonces ya tenía cierto apoyo municipal. El pueblo celebró el acontecimiento, pues en marzo de ese mismo año ya tenía una academia con 24 alumnos.

A mediados de 1914, y debido a ciertas divergencias con algunos sectores de la Sociedad «Euterpe» -que era el nombre que recibía la banda en esa época-, don Miguel Castillo renunció a la dirección y abandonó la localidad güimarera. Tras este suceso, el Ayuntamiento de Icod de los Vinos requirió sus servicios para que dirigiese su banda municipal. 

Su estancia allí fue muy productiva, como compositor logró su plena madurez con obras como los pasodobles «A la villa de Icod», «Aires del terruño» y «Cheme, gofio, papas y mojo picón»; o la marcha «Amarca», inspirada en la leyenda de la joven guanche icodense del mismo nombre. 

Sin embargo, los amigos güimareros de su juventud le solicitaban insistentemente que volviera; así, en abril de 1920, el entonces alcalde de Güímar don Ignacio González García encomendó a don Miguel Castillo la reorganización de la disuelta banda municipal.

En esta segunda etapa güimarera escribió bastantes piezas pequeñas: su «Villancico pastoril»; la «Salve a la Virgen del Socorro», que dedicó a don Domingo Pérez Cáceres, «¿Pares o nones?», dedicado al maestro de instrucción primaria don José Hernández Melque, o el pasodoble «El 29 de junio», que dedicó al maestro Cobeño.

A partir de esta desdichada fecha, y pese a las muestras de solidaridad recibidas de muchos puntos de la isla, la salud de don Miguel Castillo se resintió. La diabetes que padecía y una gripe complicada en tuberculosis, propiciaron su fallecimiento, que tuvo lugar en octubre de 1929, a los 52 años de edad, en su domicilio de la calle Marrubial.

El maestro Castillo dejó escritas alrededor de 115 composiciones, muchas de ellas inéditas. Entre estas, además de las reseñadas obras dedicadas a las fiestas de El Socorro, podemos destacar el "Himno al Drago Icodense", el intermedio "Soñando", la serenata "Noches de Güímar", o su obra cumbre "Rapsodia Tinerfeña".

Don Miguel Castillo había asumido profundamente la canariedad, hasta el punto de que era el músico que más a fondo conocía y con más cariño había estudiado el folclore musical de nuestra región.

En octubre de 1933, con motivo del 4o aniversario de su muerte, la banda realizó dos actos en homenaje a su memoria, uno en el cementerio y otro en la Plaza de la República, donde se dio un concierto con ejecución de varias composiciones del maestro. En junio de 1961, el Ayuntamiento le rindió un nuevo homenaje póstumo, dando su nombre a una calle del barrio del Rincón, cuya placa se descubrió en 1962. Finalmente, en diciembre de 1986, el Ayuntamiento de Güímar acordó, por unanimidad, nombrarlo Hijo Adoptivo de la ciudad a título póstumo, haciéndose el acto de entrega del correspondiente pergamino a su hijo, en un acto celebrado en junio de 1987, donde actuaron la banda de música y la agrupación Amigos del Arte, que interpretaron obras del homenajeado; a continuación se descubrió una placa en la casa donde vivió y murió este ilustre músico, que desde el año 2010 es sede de nuestra Asociación.

D. Alfonso Hernández y Hernández

D. Álvaro Díaz Martín

D. Manuel Delgado Pérez

(Director en 1934, y de 1936 a 1937)

Nació en la calle San Pedro Arriba de Güímar el 12 de marzo de 1901.

Siendo aún niño fue nombrado sacristán de la parroquia de San Pedro, empleo que ejerció desde el 1 de diciembre de 1912 hasta 1920. Simultáneamente, dada la gran afición por la música que siempre tuvo, comenzó a aprender con los sochantres y organistas de dicha parroquia. También aprendió a tocar el piano y la trompeta; este último instrumento en la Banda de Música de la localidad. 

 En 1920, cuando don Domingo Pérez Cáceres fue trasladado a la parroquia de El Salvador de La Matanza de Acentejo, éste no quiso desprenderse de su valioso colaborador y llevó con él a don Manuel, para desempeñar en ella el empleo de sochantre-organista. En virtud de esta responsabilidad, también preparó y dirigió el coro parroquial.

 Sus cualidades musicales enseguida trascendieron fuera de la iglesia, de modo que con motivo de las citadas fiestas del "Salvador del Mundo", en dicho año 1920, participó en una velada literario musical, tal como destacó ese mismo día un periódico: "Interpretará al piano algunas obras musicales el inteligente joven don Manuel Delgado Pérez" . Simultáneamente, durante varios años asumió la dirección de la Banda de Música "El Salvador" de dicha localidad, para lo que contó con el apoyo del párroco local, su paisano don Domingo Pérez Cáceres, quien mientras regentó la parroquia fue un firme protector de dicha agrupación. Compatibilizó dicha labor con la de sochantre-organista, incluso en otros pueblos de la comarca de Acentejo. Sobre su labor al frente de la Banda, el periódico La Prensa recogió el 13 diciembre de ese mismo año 1922 su participación en la fiesta organizada en La Matanza con motivo de la inauguración de la estación telefónica instalada en ese municipio: "Concurrió también su banda de música que, bajo la inteligente dirección del profesor don Manuel Delgado Pérez, ejecutó, brillantemente, las mejores obras de su repertorio". Con motivo de la festividad del Sagrado Corazón de Jesús, celebrada también en La Matanza en julio de 1923, participó con su banda en la procesión, 

Desde niño formó parte de la Banda de Música de su villa natal, en la que tocó la trompeta y a la que se reintegró tras su regreso a Güímar, como músico de primera. También fue, hasta finales de los años veinte, componente de la orquesta "Euterpe", fundada por el maestro Castillo, que amenizaba las veladas musicales del antiguo teatro-cine de Güímar y en la que tocaba el piano.

En abril de 1934, fue nombrado por el Ayuntamiento subdirector de la Banda de Música de Güímar y, como tal, encargado de la dirección por renuncia de don Antonio Ossorio y Recco; permaneció accidentalmente al frente de ella hasta diciembre del mismo año, en que fue sustituido por don Manuel Hernández Martín. 

Años más tarde, en octubre de 1936, don Manuel se hizo cargo de nuevo de la dirección de la banda, en esta ocasión reorganizada por Acción Ciudadana con los instrumentos cedidos por el Ayuntamiento, que en julio de 1937 decidió subvencionarla; y poco tiempo después también se le nombró profesor de la Academia. Cesó en dichas responsabilidades a finales de 1940, siendo sustituido por otro músico de la misma banda, don José Antonio Aguilar Delgado; aunque continuó perteneciendo a dicha agrupación como trompeta 1º hasta, aproximadamente, 1944.

Don Manuel Delgado Pérez falleció en el Hospital Civil de Santa Cruz de Tenerife el 7 de febrero de 1958, cuando contaba tan solo 56 años de edad. 

D. José Antonio Aguilar Delgado

D. Rafael Márquez Campos

D. Felipe Neri Gil Marrero 

(Director de 1994 a 2007)

Nace en Arafo en 1961, dedicándose desde muy joven a los estudios y actividades musicales, iniciando estos en la Banda de Música "La Candelaria" de Arafo, bajo la dirección del Maestro Don Amílcar González Díaz. Realizó sus estudios de solfeo y flauta en el Conservatorio Superior de Música de Santa Cruz de Tenerife con los profesores Argelia Pérez y Evencio A. Pérez Fariña.
Perteneció a la Orquesta Sinfónica de Tenerife como instrumentista de flauta y flautín durante varias temporadas.
Asimismo, ha participado en los Festivales de Ópera de la Asociación Tinerfeña de Amigos de la Ópera (ATAO) y en los Festivales de Zarzuela (1985).
Es miembro fundador de la Orquesta de Cámara de la Ciudad de San Cristóbal de La Laguna (1987), así como del quinteto de viento y madera "Añavingo" de Arafo (1990) del cual sigue siendo componente.
Estudió dirección de Banda en los años 1983 y 1984 con el profesor Amando Blanquer y en los años 1991, 1992 y 1993 con el profesor Adam Ferrero. 

Desde 1983 hasta 1994 fue Director titular de la Banda de Música de Guía de Isora y desde ese año fue Director titular de nuestra Banda de Música y de la Academia hasta el año 2007.

D. Miguel Ángel Mateo Gijón 

D. Benigno González Coello

(Director desde 200

Comenzó su formación musical en Güímar, su pueblo natal, iniciándose en solfeo con Rafael Márquez y dos años después trasladándose a Arafo para proseguir con Amilcar González estudiando solfeo, teoría y flauta.

Fue alumno de la primera promoción en la filial del conservatorio (situada en Arafo) y después se presentaría como libre en el acceso a grado medio en el Conservatorio Superior de Tenerife donde cursó en las especialidades de flauta y piano.

En 1980 hizo su incursión en el mundo del Jazz, con los profesores Luis Vecchio y Bébu Mârtin, recibiendo formación en flauta, piano y armonía moderna.

Amplió su formación en música de cámara en Barcelona, con Joan Torres y Mireia Colomer; y en Madrid con Pedro González y Enrique García.

En Londres recibió clases de flauta, piano y orquestación para brass band y orquesta de cámara, con prestigiosos profesores de  la London Academy Contemporary.

Estudió contrapunto y orquestación con el compositor canadiense Melkis Makandar, así como armonía contemporánea sobre tratados dodecafónicos con Daniel Johansen y amplió sus conocimientos en música afrocubana con Giraldo Piloto y Manuel Simone en la Habana (Cuba).

Orquestación para big band con Arturo O ́farril (Brooklyn - New York ) y realizó numerosos cursos de dirección de orquesta, banda y coros con reconocidos músicos entre los que destacan Santiago Reig, Phillip Sparke o Jan Van der Roost, entre otros. Invitado por uno de sus profesores, viajó a Praga asistiendo a un curso de composición y dirección sobre las corrientes culturales del expresionismo y serialismo dodecafónico.

Títulos y distinciones

MEDALLA DE ORO DE LA ISLA DE TENERIFE


MEDALLA DE PLATA DE LA CIUDAD DE GÜÍMAR

Recibida el 22 de Noviembre del año 1984. El acto de entrega de la medalla tuvo lugar en el Cinema Los Ángeles el 24 de ese mismo mes, con motivo de la festividad de Santa Cecilia.  

PREMIOS "MIGUEL CASTILLO DE LA MÚSICA" 

Fueron creados por el Ayuntamiento en el año 2000, con dos modalidades: una de composición musical, la cual será estrenada por la Banda Municipal de nuestra asociación, y con una importante cuantía económica como premio; y otra para instituciones y colectivos vinculados a la cultura musical, sin asignación económica. Se concede por un jurado designado por el Pleno del Ayuntamiento y se entrega en el marco de la Fiesta de Arte de las Fiestas de San Pedro. Menos el primer año, en que se concedieron por el Pleno de la Corporación municipal a propuesta de la Comisión de Honores y Distinciones, el de compositor se concede por un jurado y el de instituciones por el Pleno a propuesta de la citada comisión. Entre corchetes se señala la fecha de la entrega. 

Recibido en el apartado instituciones y colectivos el 20 de Junio de 2009, por el 155 aniversario de nuestra Asociación.  

Pasodoble "Al Socorro"

En el año 2009 se cumplió el primer centenario del pasodoble "Al Socorro", una obra entrañable, cuya música fue compuesta en 1909 por el músico y compositor aragonés don Miguel Castillo Alfonso, por entonces director de la banda de música de Güímar, mientras que la letra fue añadida en 1970 por el recordado abogado, político y escritor güimarero don Pedro Guerra Cabrera; tristemente ambos personajes murieron prematuramente, con tan solo 53 y 54 años de edad, respectivamente. Esta bella pieza musical invita al pueblo a acudir a la playa del Socorro a rememorar la aparición de la Virgen, por lo que a sus compases es fácil que a los güimareros y a otros muchos vecinos del Valle (sobre todo araferos) se les escapen lágrimas de emoción y alegría, las mismas que les produce su fiesta más entrañable. Hoy constituye el auténtico himno de la fiesta de la Virgen del Socorro y una de las principales señas de identidad del pueblo de Güímar y de toda la comarca. 

En agosto de 1909, el maestro Castillo dio los últimos retoques a la que, sin duda, es para los güimareros su obra más emblemática, el logradísimo pasodoble "Al Socorro", que estrenó con la Banda de Música de Güímar el 7 de septiembre inmediato y que compuso expresa y exclusivamente para estas fiestas, sobre todo para la alegre diana que en la madrugada de dicho día anunciaba a los güimareros el comienzo de los festejos, de los que ha pasado a ser su himno popular. Por lo tanto, en 2009 se cumplió el primer Centenario de esta obra musical, auténtico patrimonio güimarero y principal seña de identidad de las Fiestas de la Virgen del Socorro. A partir de su estreno, este pasodoble ha sido interpretado sin descanso y hasta el presente por la Banda de Música de Güímar, siempre en su festividad y bajo la batuta de los diferentes sucesores de su autor.  

Participación en actos del municipio de Güímar


Fiestas Patronales de San Pedro Apóstol.


Fiestas del Socorro.

Corpus Christi.

Desde el 2018, un grupo de músicos decidieron retomar una antigüa actividad y tradición de nuestra Asociación: realizar las alfombras al rededor de la Plaza de San Pedro con motivo de la procesión del Corpus Christi, en la que también participamos.

Semana Santa de Güímar.


Romería de San Antonio Abad.


Festividad de Santa Cecilia.

Concierto de Navidad.

Procesiones y conciertos en diferentes barrios del municipio.

La Hoya, Guaza, La Inmaculada Concepción, Fátima, San Juan, El Calvario, el Escobonal, el Puertito.

Hermanamiento con el municipio de Tacoronte

No hay conocimiento a ciencia cierta de cual fue el origen de la amstad que unió los municipios de Güímar y Tacoronte. Pero cada año, una masiva peregrinación de güimareros se dan cita  en el municipio norteño para celebrar allí la fiesta del Cristo de los Dolores. 

Lo cierto es que al menos desde el siglo XIX se conocen traslados desde la por entonces Villa de Güímar a Tacoronte. A partir de 1980 esta tradición se reforzó con la organización de peregrinaciones desde la mayoría de las asociaciones de vecinos, tales como La Hoya, Guaza, San Pedro Arriba y Abajo y Chacona, entre otros.

Cada tercer domingo de septiembre además de participar en las ceremonias religiosas, disfrutar de la gastronomía y los vinos de Tacoronte. Muchos son también los peregrinos que se desplazan a pie, cruzando la cumbre de la isla por el paso de Las Barreras, llegando de madrugada a las puertas del santuario del Cristo.

Nuestra banda de música ha tenido el honor durante muchos años de poner la parte musical en la multitudinaria procesión del mediodía de este día señalado.

La otra cara del hermanamiento, la vivimos cada 28 de Junio, cuando son los vecinos de Tacoronte los que se dan cita en nuestro municipio para vivir las fiestas patronales de San Pedro Apóstol, donde la Banda de Música "Santa Cecilia" de Tacoronte nos acompaña en la procesión de retorno del patrón del municipio hacia la Iglesia de San Pedro.

Banda miembro de la Federación Tinerfeña de Bandas

La Federación tiene por objeto promover, proteger, reanimar, difundir y significar la afición, enseñanza y la práctica de la música. Nuestra asociación participa todos los años en 3 actos organizados por la Federación Tinerfeña de Bandas.

Concierto del ciclo "Primavera Musical"  y Congreso anual de Bandas de Música

Concierto con motivo del día de Canarias

Organizado por esta federación en el Auditorio Adán Martín de Santa Cruz de Tenerife y en diferentes municipios de la isla, cuyo objetivo es el promover la relación entre las diferentes bandas de la que participan y dar muestra del trabajo de cada una de ellas. 

Coincidiendo con la Fiesta del Gofio que se celebra en nuestro municipio el día 29 de Mayo, nuestra Banda de música participa cada año deleitando con música tradicional canaria a los vecinos que se dan cita en la Plaza del Ayuntamiento para disfrutar de las actividades que organiza la concejalía de Cultura.

Congreso anual de Bandas de Música

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